Un particularidad de las llamas es que tienen fleco muy gracioso. Como existe tanta variedad de colores y de tipo de pelaje, es muy difícil encontrar una llama igual a otra en cuanto a su look. Sin embargo, esta particularidad no se limita a despertar nuestra simpatía. El flequillo de estos animales cumple una función casi vital.
Como sabéis, este animal habita mayormente en el altiplano latinoamericano. Allí, son predominantes los paisajes de altura con escasos árboles y temperaturas extremas. Así, la llama está expuesta a la luz natural del sol la mayor parte del día. A esto hay que sumarle, situaciones de nieve perenne o circunstancial que hacen que esta luz se refleje y obnubile a cualquier mortal. Es aquí donde su flequillo juega un papel primordial, ya que actúa como «gafas de sol». Es por este motivo que al momento de la esquila para obtener su lana, jamas se debe tocar el flequillo, ya que este le sirve como protección natural ante la luz solar.